Parece mentira que se haya acabado el verano ya y hayamos entrado en el otoño... Pero aquí estamos de nuevo, con las pilas recargadas, muchas ganas de cocinar y ¡muchas recetas nuevas!. Entre ellas, la que "gichamos" este finde con el asaltablogs, que estrena nueva temporada con los chorizos más hábiles de la blogosfera.
Y ahí estaba Cuky, con las mallas de camuflaje preparadas, (raro viniendo de él, que siempre suele perderlas), su bolsa nueva de choricear, dos rayitas negras pintadas bajo los ojos, y muchas ganas de ir a fisgar cocinas ajenas.
Esta vez sí que lo tenía todo planificado, así que, sólo tuve que dejarme llevar y hacerle caso al chef, que tenía ya pensado un método para entrar en la cocina de Mabel sin dejar huella y en un tiempo récord. Estaba intrigadísima por conocer su plan perruno.
A las 00:00 hora zulú, entramos por la puerta de Mabel con mucho sigilo y un planning muy concreto. No tardamos en dar con los ingredientes y la receta que queríamos. Fue todo pan comido e incluso, nos sobró tiempo.
Cuando acabamos, me puse a borrar las posibles huellas que hubiésemos dejado y volví a la cocina satisfecha para encontrarme al chef tomando un tentempié y llenándolo todo de migas, restos de la taza en la mesa y mucho azúcar desparramado por el suelo.
-¿Cuuuéee?...-Me dijo con la boca llena de algo que parecían magdalenas. Sí, magdalenas, varias. Tenía una más en cada mano, los bigotes llenos de migas y las líneas negras debajo de los ojos emborronadas. No le dejé decir más. Le cogí en volandas y me lo llevé rápido de allí antes de que entafarrase nada más.
Dejamos a la pobre Mabel sin magdalenas, sin receta y con la cocina hecha un revuelto de migas, huellas perrunas y posos de café.
Desde aquí, con el chef supervisando a mi lado, le pedimos que no sea vengativa si algún día viene a asaltar nuestra cocina.
¿Qué os podemos decir de estas ricas magdalenas?...
¡¡Aains!!...Que además de estar buenísima y volar en un "pis-pas", son súper fáciles y rápidas de hacer. Ideales para esos días en los que os apetece algo dulce pero no tenéis muchos ingredientes o no queréis complicaros mucho. Son tiernas, ricas, ¡¡y entran solas!!.
Ahora, té en mano, nos vamos corriendo a ver las recetas de los demás compis asaltantes a las que os invitamos a echar un vistazo.
¡Disfrutad del domingo y reponed pilas para el comienzo de semana!.
(Sobre todo para los martes...odiosos martes ¡¡gruuuff!!).
¡¡Besote de osete feliz!!
Y ahí estaba Cuky, con las mallas de camuflaje preparadas, (raro viniendo de él, que siempre suele perderlas), su bolsa nueva de choricear, dos rayitas negras pintadas bajo los ojos, y muchas ganas de ir a fisgar cocinas ajenas.
Esta vez sí que lo tenía todo planificado, así que, sólo tuve que dejarme llevar y hacerle caso al chef, que tenía ya pensado un método para entrar en la cocina de Mabel sin dejar huella y en un tiempo récord. Estaba intrigadísima por conocer su plan perruno.
A las 00:00 hora zulú, entramos por la puerta de Mabel con mucho sigilo y un planning muy concreto. No tardamos en dar con los ingredientes y la receta que queríamos. Fue todo pan comido e incluso, nos sobró tiempo.
Cuando acabamos, me puse a borrar las posibles huellas que hubiésemos dejado y volví a la cocina satisfecha para encontrarme al chef tomando un tentempié y llenándolo todo de migas, restos de la taza en la mesa y mucho azúcar desparramado por el suelo.
Dejamos a la pobre Mabel sin magdalenas, sin receta y con la cocina hecha un revuelto de migas, huellas perrunas y posos de café.
Desde aquí, con el chef supervisando a mi lado, le pedimos que no sea vengativa si algún día viene a asaltar nuestra cocina.
Ingredientes para 12 magdalenas: (Asaltablogs)
(*Nota: Utilizamos la medida de un yogur -de 125 grs.- como medida para los ingredientes, como hizo Mabel)
~3 huevos M
~1 medida de aceite de oliva suave
~1 medida de nata para montar
~2 medidas de azúcar (con un poquitín más para decorar por encima)
~3 medidas de harina de trigo
~1 cucharadita de "Princess cake cookies"
~1/2 sobre de levadura química (tipo royal)
~Una pizca de sal
Preparación:
~Precalentamos el horno a una temperatura fuerte: unos 220-230º y preparamos las capsulitas en un molde especial para magdalenas o cupcakes.
~Batimos el azúcar con los huevos unos 5 minutos, comenzando a velocidad media y subiendo a alta. La mezcla quedará muy esponjosa.
~A continuación, añadimos el extracto y la nata, y batimos de nuevo a velocidad alta, otros 2 minutos para añadir aire a la mezcla.
~Añadimos el último ingrediente líquido: el aceite, poco a poco y sin dejar de batir, a velocidad media. Cuando acabemos de incorporarlo, seguimos batiendo un par de minutos más.
~Por otro lado, tamizamos la harina, la levadura y la sal y añadimos estos ingredientes secos a los húmedos en dos veces, revolviendo con unas varillas.
~Echamos la masa en los moldes y dejamos reposar en la nevera unos 15-20 minutos mientras precalienta el horno. Pasado este tiempo, sacamos el molde de la nevera, espolvoreamos con muuuucho azúcar por encima y metemos las magdalenas en el horno y bajamos la temperatura a 210º. Dejamos hornear durante 15-18 minutos. Dependerá del horno pero, a partir de los 15 minutos, conviene estar atentos por si se doran demasiado.
¿Qué os podemos decir de estas ricas magdalenas?...
¡¡Aains!!...Que además de estar buenísima y volar en un "pis-pas", son súper fáciles y rápidas de hacer. Ideales para esos días en los que os apetece algo dulce pero no tenéis muchos ingredientes o no queréis complicaros mucho. Son tiernas, ricas, ¡¡y entran solas!!.
Ahora, té en mano, nos vamos corriendo a ver las recetas de los demás compis asaltantes a las que os invitamos a echar un vistazo.
¡Disfrutad del domingo y reponed pilas para el comienzo de semana!.
(Sobre todo para los martes...odiosos martes ¡¡gruuuff!!).
¡¡Besote de osete feliz!!